:

¿Cómo afectan las tendencias de la moda a las personas?

Erik Orellana
Erik Orellana
2025-06-13 07:57:14
Count answers : 9
0
La vestimenta es una necesidad funcional y además es una herramienta poderosa de autoexpresión, construcción de identidad y bienestar personal. Investigaciones recientes han demostrado que lo que llevamos puesto puede influir en nuestra motivación, autoestima e incluso en la forma en que nos perciben los demás. Lo que vistes afecta absolutamente tu estado de ánimo. La ropa puede ser un disparador de acción. La gente tiende a pensar que primero cambia la actitud y luego el comportamiento, en realidad, no funciona así, funciona en la dirección opuesta, primero cambias tu comportamiento y luego te sientes mejor. La moda no solo nos protege del clima o cumple con normas sociales, sino que también refleja nuestra personalidad, gustos y valores. El color, la imagen, el estilo y la belleza afectan el comportamiento humano, mientras abordan normas culturales y sensibilidades culturales. La selección intencional del vestuario puede generar un estado de ánimo positivo y aumentar la autoestima estatal. La singularidad en el vestuario mejora la autoestima y lleva a un mayor progreso en la consecución de objetivos y a una menor evitación social. La ropa tiene el poder de modificar nuestra percepción personal y nuestra actitud. El consumismo impulsado por las tendencias de la moda puede generar ansiedad y estrés. La moda no es solo una cuestión de estética o tendencias, sino una herramienta poderosa que influye en nuestra motivación, autoestima y bienestar. La moda no debe ser una fuente de estrés, sino un ejercicio de identidad y una conversación contigo misma.
Lara Ramos
Lara Ramos
2025-06-05 20:14:06
Count answers : 7
0
Según la psicóloga Laura López Calderón, estamos atrapados en un ciclo interminable de consumismo en nuestra sociedad. Este fenómeno se asemeja a un agujero negro que nos hace creer que la próxima compra nos brindará la satisfacción que siempre buscamos, aunque nunca llegue a llenar ese vacío. En la actualidad, el consumismo en la moda se ve intensificado por las redes sociales, que nos bombardean constantemente con mensajes sobre las últimas tendencias y productos. Además, la exposición constante de perfiles que exhiben vidas perfectas alimenta el deseo de adquirir ropa, con la esperanza de alcanzar, como ellas dicen, una falsa sensación de felicidad. La impulsividad está relacionada con las mismas motivaciones que impulsan otras adicciones. En consecuencia, se trata simplemente de llenar huecos, vacíos o malestares; más bien, se manifiesta en comportamientos como la compra del último producto de moda: Todo esto busca aliviar de manera inmediata un malestar, generando un pequeño impulso de dopamina en nuestros cerebros estimulados por la rapidez de las redes sociales. Y en lugar de dejarnos satisfechos y tranquilos, genera la necesidad constante de buscar más. Además, afirman que en algunos casos se puede considerar una adicción. El problema reside en que muchas personas no son plenamente conscientes de estas consecuencias, en parte porque el proceso de compra está muy anonimizado y se realiza de manera online. No obstante, apuntan que no todo el mundo puede poner límites, porque cuando hay una adicción muy fuerte, la gente se endeuda.