¿Cómo escoge un perro a su persona favorita?

Cuando un can elige a una persona como su favorita, crea un lazo muy estrecho que es fácil de percibir. Lo principal a tener en cuenta sobre este tipo de vínculos es que los perros suelen tener mejor relación con las personas que más se parecen a él en términos de personalidad y hábitos. Un perro puede ser inseparable de su humano de confianza. Seguirte a todas partes es usual que un perro que se siente cómodo con su dueño lo siga a todas partes. No importa a dónde vaya: si sale a tirar la basura, cambia de habitación o sale al jardín; el perro lo seguirá a todas partes. Sin embargo, es importante saber diferenciar cuando un perro sigue a un humano de manera positiva o cuando sufre de ansiedad por separación. Los perros buscan estar en contacto físico con sus personas favoritas. Es normal que cuando un can se sienta seguro y en confianza con una persona busque estar en contacto con ella, ya sea a través de mimos, dormir pegado o acostarse cerca suyo. Un perro suele buscar dormir a los pies o entre las piernas de su persona favorita. Si recurre a nosotros buscando apoyo cuando se siente enfermo o asustado, significa que se siente seguro con nuestra compañía. Es la principal muestra de cariño a tener en cuenta.

Los perros son capaces de crear distintos vínculos con los seres humanos con los que conviven y en esos lazos diferentes, prefieren a unos o a otros. Estos animales eligen a su individuo favorito en base a los parecidos con ellos mismos, forjando una relación muy especial y directa. Un individuo activo, que sale a hacer ejercicio con un perro que también lo es, es muy factible que se convierta en el favorito por encima de otros miembros de la familia con los que el animal no comparte esta clase de aficiones. Cuando creamos un vínculo estrecho con un perro nos hacemos significativos para él y, al igual que nos pasa a los seres humanos, la preferencia puede ser a ojos vista desde caprichosa hasta incomprensible, puede que sea la persona que siempre lo acompaña en los paseos, la que le dé de comer o la que le proporcione tan solo más mimos y caricias. La dinámica con un miembro de la familia siempre está asociada a algunas actividades y momentos y con otra persona, a otras actividades y a otros momentos. El perro obedece rápidamente a nuestras órdenes con respecto a otras personas, va detrás nuestro siempre, busca nuestro contacto físico ya sea acostándose encima de nuestros pies, al lado nuestro o pidiéndonos caricias, nos hace un recibimiento especial con saltos de alegría y lamidas, y elige nuestras piernas o pies para dormir y descansar. Lo más importante, y que será definitivamente la señal de que somos su ser humano favorito, es si recurre a nosotros buscando apoyo cuando se siente enfermo o asustado, lo que se traduce en que se siente seguro con nuestra compañía.

Es natural que los perros elijan a su persona favorita, pues, como animales sociales, los perros seleccionan a un individuo que les brinda amor, atención y experiencias positivas. La persona favorita de un perro es aquella que le brinda el tiempo y la atención de mejor calidad, además de que comparte energía positiva y le demuestra un cuidado genuino. Muchos perros escogen a su persona favorita basándose en quién los cuidó durante sus períodos claves de socialización, que abarcan desde el nacimiento hasta los seis meses. Durante esta etapa, el cerebro de los animales es altamente receptivo, lo que significa que las primeras experiencias de vida pueden tener un impacto significativo en su comportamiento a lo largo de su vida. Los perros suelen escoger a las personas que prefieren a quienes les brindan más atención, afecto y tiempo individual de calidad. El individuo favorito de un animal suele ser aquel que le proporciona seguridad, calidez y una sensación reconfortante. Los canes escogen a su persona favorita gracias a la asociación positiva, es decir, al crear un vínculo positivo con la persona que los alimenta, los pasea y les proporciona juguetes y golosinas. Es importante resaltar que, al igual que las personas, los perros también tienen su propia personalidad y gustos. Los seres humanos escogen a sus mejores amigos basándose en su personalidad; los perros hacen lo mismo y escogen a personas que son compatibles con ellos. Normalmente, los canes que tienen una persona favorita suelen acompañarla a todos lados, comparten sus juguetes con este individuo, se emocionan cuando lo ven, e incluso llegan a dormir junto a ellos.

La paciencia, la consistencia, el cariño y la disposición para el juego son atributos que los perros valoran. Si eres la fuente de estas cualidades, es probable que te hayas ganado un lugar especial en el corazón de tu amigo peludo. Los perros se conectan con aquellos que les brindan tiempo de calidad. Paseos, juegos interactivos y momentos de tranquilidad compartidos fortalecen los lazos emocionales. El cuidado diario refuerza la conexión. Los perros reconocen a quienes les brindan atención constante. Cada perro tiene una personalidad única, y respetar su individualidad es clave. Observa sus preferencias, juega según sus estilos y comprende sus señales. Los perros son criaturas de hábito. Siguen rutinas y se sienten más seguros con estructura. Si eres la persona que establece y mantiene una rutina positiva, es probable que te conviertas en su favorito.

A la pregunta de si las mascotas deciden quiénes son sus personas favoritas, la respuesta es un claro sí. De hecho, habitualmente resulta bastante sencillo identificar a los afortunados, tan solo hay que prestar atención a su comportamiento, sobre todo en el caso de los perros. Los perros son animales comprometidos, leales y que dedican un amor incondicional a sus dueños. Al fin y al cabo, se trata de criaturas sociales que necesitan el desarrollo de este tipo de vínculos, se trata de algo esencial en su conducta. Los perros son capaces de decidir quién es su persona favorita, aquella con la que ha logrado formar el vínculo más fuerte y que supone un punto de referencia en su vida. Muy sencillo, únicamente hay que fijarse en su manera de actuar y en una serie de comportamientos específicos. Los perros descansan cerca de sus personas favoritas por dos motivos. El primero, protegerlos de cualquier riesgo. Y, el segundo, porque ellos también se sienten a salvo. Si exponen su barriga y se dejan acariciar, significa que sienten plena confianza y que no perciben ningún tipo de amenaza por parte de la persona. Que un perro le lleve sus juguetes a su dueño para compartirlos es una evidente muestra de aprecio y confianza. Existen varios motivos que explican por qué un perro mantiene contacto visual con una persona. Puede ser que esté observando su conducta o que sea un aviso de peligro. Pero, en el caso de sus dueños, supone una búsqueda de recibir atención y apoyo.

Un perro puede ser inseparable de su humano de confianza. Lo principal a tener en cuenta sobre este tipo de vínculos es que los perros suelen tener mejor relación con las personas que más se parecen a él en términos de personalidad y hábitos. Es usual que un perro que se siente cómodo con su dueño lo siga a todas partes. No importa a dónde vaya: si sale a tirar la basura, cambia de habitación o sale al jardín; el perro lo seguirá a todas partes. Sin embargo, es importante saber diferenciar cuando un perro sigue a un humano de manera positiva (para jugar o lamerlo) o cuando sufre de ansiedad por separación. Es normal que cuando un can se sienta seguro y en confianza con una persona busque estar en contacto con ella, ya sea a través de mimos, dormir pegado o acostarse cerca suyo. Si recurre a nosotros buscando apoyo cuando se siente enfermo o asustado, significa que se siente seguro con nuestra compañía. Y agrega: "Si recurre a nosotros buscando apoyo cuando se siente enfermo o asustado, significa que se siente seguro con nuestra compañía".